34. FINALMENTE SACERDOTE

Llegó, por fin, el día de la ordenación sacerdotal. Montfort se creía tan poco digno de tan excelso honor que quería retrasar más y más ese momento. Redobló sus plegarias y su preparación espiritual. El 5 de junio de 1700 recibió la ordenación sacerdotal y pasó todo el día delante del Santísimo Sacramento.
Luego de otros cuantos días de preparación, celebró la primera misa en el altar de Nuestra Señora, en la Iglesia de San Sulpicio. Después no pensó en otra cosa que en las almas para las cuales lo había llamado Dios. Se dedicará totalmente a la evangelización del Pueblo de Dios, no obstante tener que superar infinidad de pruebas…