
Publicaciones Similares

84. «¡ÁBRAN A JESUCRISTO!»
En Dinán, lo mismo que en Poitiers y en Rennes, Montfort estaba continuamente rodeado de una multitud de pobres, a los cuales enseñaba el catecismo y proveía de medios para vivir, acudiendo a los fondos de la divina Providencia. Una tarde, encontró tendido en tierra en una calle de Dinán, a un pobre cubierto de…

131. LOS MISIONEROS DE LA COMPAÑIA DE MARÍA
Montfort imploró con oraciones y gemidos desde el año 1700 a los Misioneros de la Compañía de María, sacerdotes y hermanos, se hallan en las cinco partes del mundo. Se dedican a la proclamación de la Palabra de Dios, dando preferencia a las misiones populares para «renovar el espíritu cristiano entre los cristianos» (Montfort). Su…

51. COMPLOT DESCUBIERTO
Las intrigas contra su vida no lograban frenar el ardor de su celo. Una señora le advirtió que no emprendiera cierto viaje a Pont-Château, porque algunos mozalbetes lo esperaban en el trayecto para asesinarlo. Montfort sonrió, al oír la advertencia que, en cambio, aterrorizaba a sus acompañantes. – ¿Cómo lo sabes?, preguntó por fin a…

123. EL AMIGO DE LOS NIÑOS
Montfort amó a los niños. Más que una caricia o una palabra amable a uno u otro, los instruyó y educó. Ya de seminarista y luego como sacerdote, se complacía en verse rodeado por muchedumbres de niños, que reunía en torno a sí mismo para enseñarles el catecismo y bendecirlos. Para mantenerlos en la práctica…

106. NUEVO HÉRCULES
¡Cuántas veces debió nuestro santo sentir que se le estrechaba el corazón al recordar su calvario de Pont-Château! Resolvió poner a salvo al menos las estatuas, arrinconándolas en un cobertizo en espera de tiempos mejores. Dos carros espaciosos las transportaron hasta las riberas de Loira. Pero, ¿cómo pasarlas de los carros a la barca alquilada…

113. TRANSFIGURADO
El día de la Candelaria de 1715, en la iglesia de los Dominicos de La Rochelle, donde tantas personas se habían convertido al escuchar sus sermones, le invitaron a predicar sobre Nuestra Señora. Habló con tal entusiasmo que la Virgen, por su parte, quiso también exaltar a su apóstol. Mientras hablaba, su rostro se transfiguró….